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CONSTRUCCIÓN DE LAS FÁBRICAS DE HIELO DE RODOLFO G. CASTILLO EN LA CIUDAD-PUERTO DE LA PAZ (1893 Y 1901)

 

Ronaldo Geraldo Cota

En el archivo Histórico Pablo L. Martínez existe un documento con el título “Ubicación donde se colocará un generador de vapor, para una Maquina que fabrique hielo en la ciudad de La Paz” fechado en marzo de 1893, asociado a la petición del ciudadano Rodolfo G. Castillo hacia el jefe político del distrito y las autoridades de salubridad, para “obtener el debido permiso sanitario y establecer en un punto céntrico de la manzana 50, una fábrica de hielo impulsada a vapor” (AHPLM, 1893: Docto.66), a esto mismo se le adjunta un croquis dibujado a tinta negra sobre papel de lino fechado en 8 de abril del mismo año, en el cual se plasma la ubicación exacta en la que se colocó el generador a vapor de dicho.

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La fábrica de hielo de Rodolfo Castillo se encontraba casi lista para su función, cumpliendo con todas las normas salubres que establecían los artículos 165 y 166 del código sanitario vigente en el estado. Sin embargo, los planos documentados de su negocio carecían de la firma de un perito titulado (requisito obligatorio) “por no haber ninguno en la actualidad en esta entidad”, debido a ello y buscando un resultado positivo, el señor Castillo se dio a la tarea de revisar, validar y firmar los planos por un “perito práctico”, el señor Félix Vermot, perito mecánico. Asimismo, pedía de favor a las autoridades públicas y sanitarias la concesión del permiso, añadiendo sería “muy perjudicial el que se le demore el permiso que solicita por todo el término que señala el código” (AHPLM, 1893: Docto.66).

    El negocio del hielo generaba un buen ingreso, debido a su importancia para la conservación de alimentos y bebidas en negocios y hogares. Durante este periodo, las familias paceñas contaban con hieleras, antecedente del refrigerador, en la cual colocaban barras de hielo para preservar y mantener en buena calidad alimentos como frutas, verduras, y productos de origen animal como leche, carne, pescado, entre otros (Mendoza, 2014: 218).

    La máquina de vapor que utilizaría el señor Rodolfo era muy conocida en la ciudad, según sus palabras “funcionó todo el año próximo pasado [1892] bajo la dirección del señor Juan E. Mendoza, durante cuyo tiempo dio pruebas de llevar los requisitos de seguridad y salubridad requeridas por la ley” (AHPLM, 1893: Docto.66).

     El expediente se elevó al Consejo de Salubridad resolvió favorablemente su petición y dando respuesta positiva el 1 de agosto de 1893.

    La fábrica fue ubicada en la propiedad del señor Rodolfo G. Castillo, frente a la Calle Central, entre las calles Segunda y Tercera (actuales calles 16 de Septiembre entre Madero y Revolución) donde actualmente se encuentra la tienda de regalos “Yessi Novedades”. Su ubicación por la Calle Central le daba un punto estratégico, gracias a que se habían asentado algunos comercios vecinos y más adelante algunos edificios de orden público de importancia en la ciudad (Castro, 2013:90). Se localizaba a la mitad de la acera de la calle Central en la manzana 50, compartiendo lugar con la casa habitación de la señora Gertrudis de Famanía a dieciséis metros por el poniente y al oriente, colindando con una caída de tejamanil propiedad del señor Valentín Ruiz.

    La maquinaria y caldera fueron colocadas bajo techo de tejamanil y con muros de material que la recubrían. Para las seguridades necesarias en el tubo de la chimenea se le pusieron dos tramos iguales de cinco pies de alambre con guarda chispa, cerrando la fuga a fin de que no pase el fuego ni las chispas.

   La caldera, fabricada en Philadelfia por la compañía “Taylor Manufacturing”, se encontraba en vertical cilíndrica con 118 pies, superficie de calefacción. Compuesta de una lámina de “grueso acero” de ¼ de pulgada, con tensión de 60,000 libras por pulgada cuadrada, trabajaba a una presión de 80 libras por pulgada cuadrada. La válvula de seguridad tenía 1 pulgada de diámetro, con un peso de 12 libras y una palanca de 11 pulgadas el largo. El diámetro del cilindro era de cinco pulgadas por siete de cabeza, trabajando a 200 revoluciones por minuto.

   Utilizaba un motor de expansión de variable automática, sin condensación que desarrollaba una potencia de ocho caballos de fuerza, moviendo así una máquina de hielo de 20 pies de largo por 7/10 pulgadas de diámetro.

    Todo hace indicar que el negocio prosperó hacia inicios del siglo XX, debido a que sufrió una serie de modificaciones y ampliaciones de sus respectivos departamentos ya que la fábrica de hielo se expandió hacia la manzana 17 ubicada en la Calle Mijares frente a la parte posterior de la Casa Ruffo. Se pidió por medio de la Segunda Comisión de Fábricas e Industrias al Consejo Superior de Salubridad, sección núm. 2313  que de igual manera que en la creación de dicha fábrica, se le proporcionara un respectivo permiso para reinstalar nuevamente una máquina de vapor; con la cual ha trabajado antes para la creación de hielo, teniendo una respuesta aprobatoria el 5 de junio de 1901, por el Consejo Superior de Salubridad quien manifestó “no tener inconveniente; con fundamentos en el artículo 112 del Código Sanitario, concédase el permiso solicitado, comunicándose al Delegado del referido Consejo de Salubridad para su conocimiento” (AHPLM, 1901: Docto.382).

Plano de localización de un generador de vapor para la fábrica de hielo propiedad del señor Rodolfo G. Castillo en la calle Central (AHPLM, MDP Núm. 127)

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Nueva Fábrica de hielo propiedad del señor Rodolfo G. Castillo en la calle Mijares (AHPLM, 1901: MDP Num.100)

La fábrica de don Rodolfo Castillo producía unas “curiosas barritas que todo el mundo podía llevar en su <<morral>> o en la bolsa de mano. Era un lujo elaborar refresco casero y las familias se daban un <<taco>> con el producto cristalino” (Arriola, 1990: 55).

 

La Paz, Baja California Sur a 10 de agosto de 2020.

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Fojas del expediente (AHPLM, 1893).

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Portada del expediente (AHPLM, 1901)

FUENTES DE CONSULTA

ARCHIVO HISTÓRICO PABLO L. MARTÍNEZ, Acervo documental. Ramo: Porfiriato. Año: 1893. Sección: Gobernación. No. de Docto: 66. Rodolfo G. Castillo solicita permiso para instalar una máquina de hielo en la ciudad. La Paz, agosto 01. No. de Expediente: 79. No. de Volumen: 243. No. de cada: 3/6. No. de Fojas: 23.

ARCHIVO HISTÓRICO PABLO L. MARTÍNEZ, Acervo Documental. Ramo: Porfiriato. Año 1901. Sección: Gobernación No. De Docto: 382. La Paz, mayo 223. Rodolfo G. Castillo solicita la ubicación de una Fábrica de hielo en La Paz, Distrito Sur de Baja California. Acervo Documental, AHPLM/ Vol. 319/ Doc. 382/ Exp. 151/ año 1901.

ARCHIVO HISTÓRICO PABLO L. MARTÍNEZ, Croquis que muestra la futura ubicación donde se colocará un generador de vapor, para una Maquina que fabrique hielo en la ciudad de La Paz. AHPLM, Acervo Cartográfico, MDP Núm. 100/ Mapoteca/ Planero/ Gaveta núm. 6.

ARCHIVO HISTÓRICO PABLO L. MARTÍNEZ, Plano dónde se muestra la distribución de una Fábrica de hielo en La Paz, Distrito Sur de Baja California, AHPLM; Acervo Cartográfico, MDP Núm. 127/ Mapoteca/ Planero/ Gaveta núm. 8.

CASTRO RIVERA, Alma Auxiliadora, Transformaciones históricas del paisaje urbano y natural de la ciudad de La Paz, siglos XIX y XX, Tesis de Maestría, Universidad Autónoma de Baja California Sur, La Paz, Baja California Sur, septiembre de 2013.

MENDOZA SALGADO, Rosa María, Crónicas de mi Puerto. La Paz 1830-1959. Gobierno del Estado de Baja California Sur, Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, Instituto Sudcaliforniano de la Cultura, Archivo Histórico Pablo L. Martínez, La Paz, Baja California Sur, 2014.

OLACHEA ARRIOLA, Rogelio, La Paz de antaño: Relatos, Cuentos, Leyendas y Anécdotas, Ayuntamiento de La Paz, Archivo Histórico Pablo L. Martínez, La Paz, Baja California Sur, 1990.

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Localización de la fábrica de hielo propiedad del señor Rodolfo G. Castillo en 1893 en el plano de la ciudad de La Paz (AHPLM, 1866)

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